POLÍTICA

Guerra por la movilidad jubilatoria: se viene el rechazo legislativo al veto de Milei

Desde la Coalición Cívica, el diputado Maximiliano Ferraro señaló que "la decisión de Milei de vetar la ley de movilidad jubilatoria revela un gobierno indiferente tanto a los jubilados como a la representación de los argentinos que ejercen ambas cámaras". Las reacciones de UxP, Encuentro Federal y la UCR, entre otros.

Los bloques de Encuentro Federal, la Coalición Cívica y la UCR se movilizaron para contrarrestar el veto presidencial a la ley de movilidad jubilatoria. Javier Milei anunció en la madrugada su decisión de vetar la ley que estipulaba un incremento del 8,1% en las jubilaciones a partir de abril. Este anuncio llevó a los bloques opositores a activar una nueva estrategia para mantener la ley vigente.

La bancada de Unión por la Patria (UxP) optó por guardar silencio sobre su estrategia hasta que el veto se oficialice en el Boletín Oficial. Sin embargo, el diputado Itai Hagman indicó que su intención es reunir los dos tercios necesarios para que la ley jubilatoria se mantenga. La UCR, por su parte, planifica convocar a la Comisión de Previsión y Seguridad Social, presidida por Gabriela Brouwer, para gestionar la insistencia en la ley.

 

Encuentro Federal, dirigido por Miguel Pichetto, expresó su apoyo a la ley de movilidad jubilatoria, resaltando que la misma tenía como objetivo mejorar los ingresos de los jubilados y brindarles mayor previsibilidad. El bloque subrayó su compromiso con el equilibrio fiscal, aunque no consideró que existiera un único camino para lograrlo.

Por otro lado, Maximiliano Ferraro, diputado de la Coalición Cívica, condenó el veto de Milei, describiéndolo como una “estafa moral profunda”. Ferraro argumentó que la decisión presidencial dañaba a los jubilados, quienes han aportado al país durante toda su vida y ahora enfrentan dificultades para acceder a alimentos y medicamentos.

 

El Congreso solo podrá revertir el veto después de que el Gobierno publique oficialmente su decisión. El Poder Ejecutivo dispone de un plazo de 10 días hábiles desde la notificación del Senado para informar su decisión al parlamento. A diferencia de un veto parcial, el rechazo del veto se tratará en las comisiones permanentes de Previsión Social y Presupuesto Nacional, no en la Comisión Bicameral Permanente.

En la sesión donde se aprobó la ley de movilidad jubilatoria, la Cámara de Diputados registró la participación de 240 legisladores de los 256 posibles, con varias ausencias. Para revertir el veto presidencial, los bloques opositores deberán asegurar al menos los 160 votos que obtuvieron previamente y buscar sumar apoyos adicionales, incluyendo a aquellos legisladores que se abstuvieron o estuvieron ausentes. La ley también establecía un ajuste anual basado en la variación del RIPTE y el IPC, además de un suplemento alimentario para asegurar que los ingresos no quedaran por debajo de la canasta básica total multiplicada por 1,09.



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