La Municipalidad de La Plata puso en marcha la capacitación de los agentes de Control Ciudadano y la Guardia Urbana Pública que trabajarán en la Zona Roja con el objetivo de sensibilizarlos y formarlos para actuar con perspectiva de género, informó este martes la comuna. Todo parece indicar que los reclamos de les trabajadores sexuales no serán escuchados: la zona se desplazará de sitio a pesar de la reticencia de quienes ganan su sueldo trabajando allí.
Ileana Cid, la secretaria de Asistencia a la Víctima y Políticas de Género, explicó por su parte: "Esta iniciativa busca contar con personal debidamente capacitado para abordar temáticas sensibles como la violencia por razones de género y el respeto a la identidad de género, brindándoles herramientas teóricas y prácticas".
La instancia de formación dio inicio en el Centro Cultural Islas Malvinas e incluyó nociones básicas sobre "violencias, género y diversidades", y continuará el viernes en el mismo espacio comunal con el concepto de "identidades diversas" como foco principal. De acuerdo al área local, durante las capacitaciones que recibirán los efectores también se detallarán cuáles son las normas internacionales y nacionales vigentes que enmarcan el trabajo sexual, se propondrán actividades interactivas y se realizarán charlas debate para trabajar en equipo.
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"La concientización y sensibilización respecto de estos temas es clave durante esta etapa de reubicación de la llamada Zona Roja", enfatizó Cid, y resaltó que estos encuentros forman parte de una serie de acciones impulsadas por la secretaría en la misma línea.
El Municipio platense se propone reubicar la tradicional Zona Roja de la La Plata a otro sector de la periferia de la capital bonaerense, lo que ha despertado las críticas del colectivo de travestis y trans que están en situación de prostitución en esa zona.
La semana pasada, la organización Otrans Argentina pidió al intendente platense, Julio Garro, ser recibidas para plantear sus objeciones a la relocalización.
"Repudiamos y nos negamos al traslado de la Zona Roja, exigimos -además- la derogación del Código de Convivencia que impulsó el intendente Garro y que fuera aprobado en 2022. Este código es meramente represivo, el mismo habilita multas y sanciones al colectivo Travesti-Trans como lo fueron los edictos policiales en otros años", precisó la titular de OTrans, Claudia Vásquez Haro en un comunicado.
Afirmó que "las personas que trabajan en la calle no son víctimas, ni objeto, el delito es responsabilidad de las fuerzas represivas, basta de persecución, implementación efectiva del Cupo Laboral Trans ya!".
