El Orgullo es sudaca: marcha contra los travesticidios y transhomicidios
Se llevó a cabo la 8° Marcha Plurinacional contra los Travesticidios y Transhomicidios, celebrado el mismo día del Día Internacional del Orgullo LGBTIQ+. La versión sudaca de un día que merece ser contado desde todas sus aristas.
Hacia las cinco de la tarde de este jueves concentrábamos en la Plaza de Mayo, territorio de lucha popular por excelencia, los grupos de activistas travesti-trans y LGBTIQ+. Es la octava Marcha Plurinacional contra los Travesticidios, Transfemicidios y Transhomicidios y Las Históricas se encuentran trenzando etiquetas con nombres sobre las rejas que rodean la pirámide de la plaza. Las etiquetas son de les chiques y adultes que murieron en manos del cistema.
"Hoy reivindicamos la memoria de las compañeras travesti trans que murieron en un contexto de travesticidio social y violencias institucionales. Esta trenzada que estamos haciendo es para recordarlas; para tener memoria de quiénes fueron, decirle a la sociedad que sí existieron, que su calidad de vida fue en ese contexto. Fuimos excluidas de la salud, el trabajo y la educación", dice Luana Salva, la presidenta de Las Históricas, mientras se ocupa de trenzar con dulzura las hebras fucsia y negro, de las que están amarradas los nombres de las chicas, los varones y les chiques que ya no están.
La presidenta de Las Históricas nos cuenta la importancia de la Marcha Plurinacional contra los Travesticidios pic.twitter.com/dZe66Y9CZg
— Infonews (@infonews) June 28, 2023
"Reivindicamos la identidad travesti trans de las que estamos presentes, y que somos la última generación de travestis trans excluidas haciendo eco de nuestras voces y pidiendo justicia", concluye decidida. Y es que las travas de su generación pusieron el pecho y la vida para adquirir los derechos que hoy protegemos con tanto celo las generaciones posteriores. Por eso ella está tan decidida: son la última generación que vivió como ciudadanes de segunda, de tercera y de cuarta. De ahora en más hay que cuidar lo conquistado.
Las columnas comenzaron a movilizarse hacia las seis de la tarde. La diferencia de una convocatoria a otra resultaba abismal: la marcha contra los travesticidios creció exponencialmente año tras año. Ahora hay un milagro que se pasea y baila entre la muchedumbre: son las infancias, las niñeces travesti trans. "Súper Travita" siempre va al frente; una niña con un antifaz brilloso y la bandera trans a sus espaldas como una superheroína. Ella está presente en todas las marchas, también lo estuvo en la del 24 de mayo cuando se reclamó por la Ley de Reparación Histórica para les sobrevivientes trans y travestis.
"Para nosotras la democracia llegó con la Ley de Identidad de Género"
gaita nihil, masculinidad trans, director de puntos suspensivos ediciones y tutor en el Bachillerato Popular Travesti Trans No Binarie Mocha Celis, también compartió su reflexión:
"El Día Internacional del Orgullo LGTBIQNB+ es un día que, en general, esta celebración o memoria —o quizás las dos, como cada une quiera llamarle— se hace en noviembre porque hace mucho frío como para hacerla en junio. Entonces las travas se organizaron para recuperar este día en homenaje a Sylvia Rivera, que era una travesti sudamericana que formó parte de la revuelta de Stonewall (Nueva York) en 1969, pero recordándola en un contexto mucho más local y junto a todos los travesticidios que ocurrieron no solo de manera violenta, mediante fuerza física, sino también los travesticidios sociales como lo son el abandono, la falta de acceso al trabajo, los suicidios...", contó gaita, quien señaló que tanto su nombre como su editorial van en minúsculas, en rechazo a la jerarquía de los nombres propios. Y añadió: "Y también la lucha se fue ampliando y agregamos otras identidades, como lo es el reconocimiento de los transhomicidios en memoria de las masculinidades no hegemónicas. Por ese lado es importante recordar a Tehuel de la Torre y a un montón de compañeros que nos faltan: Santiago Cancinos, Lucho Ávila, Joe Lemonge. Está bueno que nosotros también nos hagamos cargo y no solo acompañemos a las compañeras sino que fortalezcamos nuestra historia", cerró.
Por otra parte, Ese Negro Montenegro, asesor de la Cámara de Diputados de la Nación, formador docente en ESI y militante transmasculino por los derechos humanos, comentó:
"Yo estoy presente desde la primera marcha, si bien tuvimos un bache durante la pandemia (aunque también intentamos activar de manera virtual, para también contenernos en ese momento tan difícil). Esta marcha para mí es una decisión política muy acertada: es hablar de los problemas latinoamericanos, y no tanto de ese orgullo importado del primer mundo que no tiene nada que ver con las historias de los movimientos LGBT latinos", valoró.
"De a poco se está ganando más participación, está habiendo mucha más conciencia respecto a de qué se trata ser anticolonialista, antirracista, de qué hablamos cuando decimos que hay travesticidios sociales. Yo creo que de a poco las comunidades van acumulando ese saber y se comprometen en función de eso. Por esto esta marcha viene creciendo de manera sostenida", señaló Ese.
A esta altura la marcha ya estaba pisando Congreso, que era el punto de llegada. El Estado nos sorprendió abriéndonos los brazos en un gesto simbólico: el palacio se iluminó con los colores del arcoíris y el Ministerio de Cultura puso un escenario sobre el que se gritaron las consignas, los nombres de nuestras muertas y nuestros muertos, los reclamos institucionales y las injusticias sociales. También se festejó al ritmo del folklore diverso y cada identidad tuvo su momento para alzar su voz.
Los 28 de junio en nuestro país son así: bien sudacas, bien de acá, bien travas y desobedientes.
