En una nueva avanzada contra los sectores vulnerables, el Gobierno nacional dispuso más ajustes: mediante un decreto publicado este lunes en el Boletín Oficial, redujo los topes que regían para la percepción de asignaciones familiares de $1.980.000 a $1.077.403 el límite de ingresos a nivel individual y de $3.960.000 a $2.154.806 el tope máximo familiar.
El Gobierno justificó el apriete al bolsillo de quienes acuden a estas asignaciones para subsanar el día a día bajo el argumento de que buscan "implementar una equitativa distribución de los recursos sobre la base del principio cardinal de solidaridad social en atención al uso racional, eficaz y eficiente de los recursos públicos".
"Las provincias y el pueblo están siendo sometidos a una extorsión"
Se trata del Decreto 194/2024, que lleva las firmas del presidente Javier Milei; del jefe de Gabinete, Nicolás Posse; y de los ministros Guillermo Francos, Diana Mondino, Luis Petri, Luis Caputo, Mariano Cúneo Libarona, Patricia Bullrich, Mario Antonio Russo y Sandra Pettovello.
Según indican los considerandos, el Ejecutivo tomó esta decisión teniendo en cuenta que "la República Argentina se encuentra atravesando una situación de inédita gravedad, generadora de profundos desequilibrios que impactan negativamente en toda la población, en especial en lo social y económico".
Milei justificó el ajuste a jubilados y hasta para Joni Viale fue un escándalo
Lo planteado en los considerandos de la normativa, va en línea con la decisión del presidente Javier Milei, que había prometido ajustar a "la casta" pero ajusta a la clase baja y media. De hecho, la semana pasada le consultaron en una entrevista por el ajuste a los jubilados, defendió: ''El segmento etario que menos pobres tiene son los jubilados''.
De hecho, para alcanzar el tan pregonado superavit fiscal de enero, que enorgullece al ministro de Economía Luis Caputo, las jubilaciones y pensiones fueron las que se llevaron el mayor ajustazo.
