El presidente Javier Milei profundiza su discurso en contra de la educación pública a la par de sus políticas de desfinanciamiento tanto en escuelas, como en universidades que atraviesan una crisis presupuestaria sin precedentes.
Recorte: universidades sin luz, ascensores ni calderas
A través de su cuenta de X, el mandatario ctó una nota de Clarín que habla del trabajo no registrado en el país, a raíz de la cual Milei apuntó contra quienes se oponen a la reforma laboral (que en realidad, avanza contra los derechos de trabajadores); en el mismo tuit asoció que la educación pública generó "un lavado de cerebro" que derivó en una "disonancia cognitiva" de quienes estudian o estudiaron en ese ámbito y, además, celebró la eliminación de la Ley de Alquileres, política que trajo aparejada una profunda desregulación en los precios para alquilar y una exigencia casi imposible de cumplir en torno a los requisitos.
Cae el relato de Milei: los alquileres se llevan casi el 35% del salario
"Pero después uno intenta modernizar la legislación laboral y se ponen como locos... La disonancia cognitiva que generó el lavado de cerebro en la educación pública es tremendo... es más, aún con el éxito rotundo que fue eliminar la ley alquileres siguen negando el resultado...", disparó Milei en su cuenta de X.
Pero después uno intenta modernizar la legislación laboral y se ponen como locos...
— Javier Milei (@JMilei) April 17, 2024
La disonancia cognitiva que generó el lavado de cerebro en la educación pública es tremendo...
es más, aún con el éxito rotundo que fue eliminar la ley alquileres siguen negando el resultado... https://t.co/QgqUkFUnnK
En la nota de Clarín, informaron que "los puestos de trabajo de los asalariados no registrados alcanzaron el récord de 5.776.000 en el cuarto trimestre de 2023, lo que marca la mayor precariedad laboral y los mayores índices de pobreza, incluso entre los que están registrados, de acuerdo a la 'cuenta de generación del ingreso e insumo de mano de obra' que difundió el INDEC".
En esa línea, plantean que "pese a la caída del salario real y de los costos laborales, los asalariados no registrados subieron de 4.753.000 en el cuarto trimestre de 2016 (39,8% del total de asalariados privados) al 43,5% a fines del año pasado. Y se estima que es el sector más afectado por la devaluación de fin de año y el aumento inflacionario: en diciembre y enero, tuvieron un alza nominal de sus salarios del 19,65% versus una suba promedio de los precios de más del 51,35%".
