Toquinho adelanta que habrá "cosas nuevas" en el homenaje a La Fusa

Es martes al mediodía. En el último piso de un hotel ubicado en Recoleta nos vemos con él: Toquinho, uno de los artistas populares de Brasil más importantes de la actualidad. Con una hermosa sonrisa entra acompañado de Camilla Faustino. 

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Trasmiten felicidad y comodidad. "Me siento en casa. Hace seis años que hago música con él y el público de la Argentina es muy amable, muy receptivo", subraya la joven Camilla, de unos 33 años y una gran proyección artística. Ella, como muchas personas de nuestro país, se toparon con las canciones que hoy interpreta cuando era chiquita y sabe que estar junto al guitarrista es un privilegio. "Toquinho es una entidad", reconoce.

La razón por la cual estamos con ellos dos es que este viernes 1 de abril brindarán un concierto especial en el Teatro Gran Rex. Lo harán tras visitar otras ciudades argentinas y como parte de una celebración por los 50 años del disco La Fusa, que grabó Toquinho junto a María Crueza acompañando al gran Vinicius de Moraes. 

El show, que debía realizarse en abril de 2020, tuvo que posponerse por la pandemia y, ahora, por razones de salud de María, Camilla sube al escenario con un protagonismo especial -y merecido, claro, porque es referente de las nuevas generaciones. 

"Cuando armamos un espectáculo grande no creo que sea necesario una banda de 10 personas para comunicar. Creo que tiene que tener contenido. Eso sí es la esencia de todo y hay que presentarlo con una buena técnica", plantea Toquinho en diálogo con Infonews y sobre la cocina de cómo es adaptar un espectáculo a salas pequeñas como bares y a teatros gigantes como el de Av. Corrientes donde estarán.

Ese contenido que menciona es lo que nos imaginamos: "Una guitarra y voces, pasando por todo: arco instrumental, arco de recuerdos, información musical" pero suma, según adelantó, "la novedad con Camilla porque va a cantar Por una cabeza y el homenaje a Violeta Parra con Gracias a la vida". "Hay cosas nuevas junto a las más viejas", anticipa Toquinho antes de subirse al escenario, un escenario al que le gusta hacerlo sentir como algo cercano para quien lo va a ver: "Yo hago una cosa casi didáctica, pero no aburridamente didáctica, que es un poco la ubicación de esto: qué estoy haciendo acá, por qué estoy acá y presentando al público las canciones. Tiene toda esa preocupación para poner al público en el escenario. Puedes estar en el escenario, tocando la guitarra solo o con una orquesta, es lo mismo".

¿Y cómo hacer para apropiarse de canciones que son parte del folklore latinoamericano? Camilla lo explica muy bien: "Cada vez que canto, cada vez que escucho una canción, la siento un poco mía, también. Después de uno de los shows, no recuerdo si fue en San Juan o Córdoba, fuimos a un restaurante y la moza que había ido al espectáculo nos dijo: 'Hola, escucho La Fusa desde los 8 años -así como yo- y es parte de mí, ese disco es una parte de mi vida'".

Es así, hay canciones que son parte de nuestra vida, tengamos la edad que tengamos, hayamos vivido los shows de La Fusa o no. Después de todo, tal como hace Toquinho citando a un poeta de Brasil... "como estoy cansado de ser moderno, ahora seré eterno". La Fusa, su repertorio, Vinicius, Toquinho y Creuza son eternos.