Ante la explosión de casos de coronavirus en Francia, que este martes volvió a batir su récord y reportó 271.000 contagios, el presidente Emmanuel Macron descargó su furia contra los negacionistas y antivacunas que se niegan a inmunizarse.
En una entrevista publicada este martes por Le Parisien, el mandatario galo afirmó que pese a lo masiva de la vacunación, "queda una pequeña minoría refractaria". Y disparó: "¿Cómo se reduce? Se reduce, perdón por decirlo así, jodiendo todavía más. Yo no estoy para hacer enojar a los franceses. Pero tengo muchas ganas de joder a los no vacunados. Y lo vamos a seguir haciendo hasta el final".
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El verbo francés utilizado por Macron fue "emmerder", que es una palabra coloquial que puede traducirse como "joder" o "hacer la vida imposible".
Las palabras del líder de la centroderecha francesa aparece en escena mientras el Gobierno trabaja en una norma que obligará a presentar certificado de vacunación que demuestre la pauta completa para la gran mayoría de las actividades que por ahora necesitan un certificado sanitario.
En cuanto a la vacunación obligatoria, que comienza a ser un tema de discusión ante los altos porcentajes de personas que niegan la gravedad de la pandemia, Macron dijo que no lo encuentra práctico. "No voy a ponerlos en prisión, no voy a vacunarlos a la fuerza", señaló.