La Justicia a través de la Cámara Nacional de Casación confirmó la prisión preventiva de Irineo Humberto Garzón Martínez, el comerciante acusado de haber abusado sexualmente de una joven venezolana de 18 años en un local comercial del barrio de Once.
Finalmente la Justicia dio marcha atrás en el beneficio que se le había otorgado al acusado de esperar el juicio en libertad. Esta tarde la Sala declaró "inadmisible" el recurso interpuesto por la defensa del imputado y convalidó lo decidido por la Sala I de la Cámara de Apelaciones del 11 de febrero.
La jueza de instrucción, Karina Zucconi, había dictado el procesamiento del imputado pero sin prisión preventiva. Este fallo fue apelado por la querella a cargo del abogado, Pablo Baqué. El abusador fue detenido el 4 de febrero y procesado con prisión preventiva, la cual fue confirmada esta semana por el juez Horacio Días.
El abuso tuvo lugar el pasado 23 de enero cuando una joven se presentó para una entrevista para trabajar como vendedora en un local de vestimenta de uniformes. Allí, el dueño le pidió que comenzara a trabajar de forma inmediata, durante la jornada le ofreció de beber varias veces.
La joven aceptó un vaso de agua y de forma inmediata comenzó a sentirse mareada, rápidamente intentó comunicarse con su familia pero sólo pudo enviar un mensaje de Whatsapp. "Creo que el dueño de donde trabajo me drogó porque me siento mareada", avisó la chica junto a la dirección del lugar.
Luego de ser alertada por la madre de la joven, la Policía llegó al lugar y encontró a la joven en el fondo del comercio casi inconsciente y al acusado que trataba de vestirla. La víctima debió ser retirada en una silla de ruedas por personal del SAME ya que no podía mantenerse en pie.
Después de su declaración, el abusador Garzón Martínez negó los cargos ante la Justicia, y acusó a la denunciante de mentirosa, aseguró que mantuvo tuvo relaciones de forma consentida y que ella se le ofreció sexualmente. Ahora deberá esperar su juicio en prisión.
