Un salario mínimo está hoy en 31.938 pesos mientras que el costo de la Canasta Básica Alimentaria, tras un aumento del 2,6 % en noviembre, llegó a los 31.724 pesos. Eso quiere decir que una familia cuyo ingreso mensual sea un salario mínimo está en la línea de indigencia porque solo pasa ese importe en unos doscientos pesos. Los números son del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) y reflejan la realidad de las y los habitantes de la Argentina: un grupo familiar requirió en noviembre de ingresos por $73.917 para cubrir los productos y servicios que conforman la Canasta Básica Total (CBT), la cual mide el umbral de la pobreza.
Los datos demuestran que, en lo que va del año, la Canasta Básica Alimentaria aumentó 39,9% y la Total 36,4%. Y, según especialistas, esta diferencia obedece a a regulación que el Gobierno realiza sobre el precio de las tarifas de algunos servicios. En tanto, durante los últimos doce meses la Canasta Alimentaria reflejó una suba acumulada de 47,1%, mientras que la Canasta Básica Total se incrementó 42,8% en el período.
Al término del primer semestre del año, el índice de pobreza se ubicó en 40,6% por debajo del 42% del segundo semestre del año pasado y 3 décimas menos del 40,9% del período enero-junio de 2020, en base a los números informados por el Indec; mientras que el nivel de indigencia fue del 10,7% en el primer semestre, frente al 10,5% de igual período del año pasado.
