Una exesclava del grupo yiadista Daesh y un ginecólogo que atiende a mujeres violadas en la República del Congo fueron los ganadores del Premio Nobel de la Paz 2018, otorgado por la Academia Sueca.
La exesclava Nadia Murad y el médico Denis Mukwege fueron reconocidos en plena era de la lucha contra la violencia sexual contra las mujeres y mientras el movimiento #MeToo se expande alrededor del mundo.
Los cinco miembros del comité noruego decidieron entre entre los 331 candidatos individuales u organizaciones propuestas (entre ellas, Estela de Carloto, titular de Abuelas de Plaza de Mayo).
El anuncio del premio despertó sorpresa entre los portales de apuestas, que tenían como favoritos a los mandatarios de Corea del Norte y del Sur, Kim Jon Un y Moon Jae-in por el proceso de paz que iniciaron recientemente. Incluso había algunas insólitas fichas puestas a Donald Trump por haber sido parte del comienzo del diálogo.
El año pasado, el premió recayó en la Campaña Internacional para la Abolición de las Armas Nucleares (ICAN).