El presidente Javier Milei salió un rato de Twitter y habló de la situación económica del país. Luego de que ayer afirmara que la compleja situación actual no es su responsabilidad sino del kirchnernismo, este viernes admitió que se vienen tiempos más difíciles: "El momento más duro será entre marzo y abril".
"Siguiendo las estimaciones del FMI, el momento más duro será entre marzo y abril y, a partir de ahí, tocaste fondo y empezás a rebotar. Si todo siguiera como viene ahora, las estimaciones del FMI dicen que podemos abrir el cepo a mitad de año y, cuando abrís el cepo, la economía se dispara para delante", dijo Milei esta mañana en declaraciones a radio Rivadavia.
Sus declaraciones surgen luego de que la Secretaría de Energía anunciara aumentos de hasta el 150% para clientes de Edenor y Edesur a partir de marzo, con aumentos mensuales desde abril, y después de que el Indec indicara que una familia necesitó casi 600 mil pesos en enero para no quedar bajo la línea de pobreza.
Canasta básica: una familia necesitó $596.000 para no ser pobre en enero
Las declaraciones de Milei recuerdan a las de quien fuera vicepresidenta durante el Gobierno de Mauricio Macri, Gabriela Michetti, cuando en junio de 2016, pasados los primeros seis meses de gestión, prometía: “Yo siempre dije que lo que estábamos viviendo era un momento probablemente de los más difíciles que tengamos que vivir, porque obviamente cuando uno sale del populismo, duele (...) Resulta que vamos en el túnel y vemos todo oscuro y algunos se empiezan a preguntar si iremos bien. El segundo semestre es el momento en el cual aparece la luz en el túnel allá lejos, pero seguís en el túnel".
Entonces, siguió Michetti, “empezás a ver que la inflación cae, empezás a ver que la mano de obra de la construcción empieza a contratarse con obras concretas en varias provincias. Empezamos a ver pequeñas luces pero no vamos a sentir en la vida familiar un alivio o una reactivación, porque para el crecimiento de la economía tenemos que esperar hasta el año que viene".
El gobierno de Macri dejó una inflación anual del 53,8%, superando la inflación de 2018 (47,6%) y se instaló como la inflación más alta que se haya registrado desde 1991. Pero hay más luz al final del túnel: en diciembre de 2019, hacia el final del gobierno macrista, la cifra de desempleo informada por el Indec fue del 9,7% y bajo su gestión cerraron 24.505 empresas, dejando a miles de trabajadores en la calle.
