Por Daniel Castelo
Los secretos de Phil Tippett, el genio detrás de Star Wars y Jurassic Park
El realizador y genio de los FX pasó por el Festival de Cine de Mar del Plata, donde presentó la formidable "Mad God". Reveló detalles sobre su trabajo junto a Spielberg y George Lucas.
30 de diciembre de 2021 - 19:36
Se define como autodidacta, ama el cine mudo y su película favorita es Moby Dick, aquella colosal obra de John Huston con guión escrito junto a Stanley Kubrick. También es uno de los socios del club de los renegados de Hollywood, pero uno que tiene con qué: fue responsable de la realización de los dinosaurios de Jurassic Park (ganó un Oscar por ello) y de la creación, realización y supervisión del universo Star Wars en su primera e insuperable trilogía (también ganó un Oscar aquí, en este caso por El regreso del jedi).
Pero Phil Tippett, sin embargo, pasó por este Festival de Cine de Mar del Plata en su edición 36 por su flamante largometraje: Mad God, pesadilla a la que ninguna descripción podría hacerle justicia. Sobre el film, sobre su trabajo junto a George Lucas, Steven Spielberg y Paul Verhoeven, sobre la decadencia de la industria de cine es que habló desde su casa-escritorio-estudio.
Un dios loco (Mad God): la pesadilla más aterradora del cine está en Mar del Plata
Además de la obra de este buen hombre, admirado por los capitostes del mundo cine y también los nerds de la cinefilia freak, la charla moderada por el programador Pablo Conde, al momento de atravesar el proceso de producción de Mad God desembocó en un puñado de declaraciones en carne viva, que retrataron las consecuencias de un proyecto que le llevó 30 años de su vida y que lo hizo cruzar la línea del colapso mental.
"Mad God me terminó destruyendo. Me sentía muy mal. De hecho estuve en un hospital psiquiátrico por mucho tiempo", disparó a modo de aperitivo sobre su flamante película.
Y continuó: "Me había deteriorado pero no me había dado cuenta. Gradualmente me empecé a ver como un indigente; mi cabello estaba terrible, mi barba, mi ropa, usaba harapos... mis manos estaban vendadas. de tanto golpear paredes".
"Odiaba trabajar en Mad God; fueron dos años (los últimos antes de tenerla terminada) de mucha tortura. Pero me obligaba a hacerlo y me alegra haberlo hecho; fue casi como una experiencia religiosa. A veces sentía que era guiado por algo o alguien más grande que yo. Canalicé algo pero no sabia qué era", completó.
"Tuve una crisis muy fuerte y me quebré", agregó sobre esa época reciente en la que caminó por los bordes de si mismo. Sobre qué hizo cuando por fin terminó el film, dijo que solo atinó a quedarse "sentado en el sofá con la televisión prendida durante 72 horas".
"Lo único que hacía era mirarla, luego eventualmente quedarme dormido. De repente empecé a salir a caminar y después caminar en la cuadra y hacerlo cada vez más", agregó y afirmó que se autodiagnosticó "con desorden bipolar por todos los cambios de humor que estaba teniendo".
"He estado yendo a terapia y al psiquiatra. Y esto le dio sentido a todo. Entendí muchas cosas de mi vida y de mi pasado. Explicó mi adicción a las drogas y el alcohol", dijo también. Y añadió: "La única cosa que podés conocer a fondo es tu propia mente y nada más".
A modo de epílogo de este episodio de su vida contó que en el proceso de trabajo del film fue acumulando muchas cosas en su casa en cantidades que terminaron saliéndose de control y fueron parte de su colapso. "Todo me inspira, todo a mi alrededor", señaló y resaltó que cuando desde el MoMA de Nueva York lo contactaron para exponer su obra se vio obligado a ordenar y deshacerse de muchas de esas cosas que había acumulado por años.
La industria de Hollywood
"El cine mudo es el mejor cine porque cuenta con una narrativa que puede salirse de lo que es Hollywood en sí", señaló a modo de título para luego desarrollar su muy aguda mirada sobre las oficinas del cine más poderoso del mundo. .
"El sistema de trabajo en Hollywood consiste en tener celebridades y éxitos de taquilla y llega a ser un ambiente muy dañado y brutal para trabajar. Te tratan mal", remarcó, para pasar luego al modo de producción industrial.
"Es muy raro que se escriban ideas originales; la mayoría son compradas, y solo se escriben ideas para grandes films. Creativamente Hollywood está en la quiebra. Estoy de acuerdo con (Martin) Scorsese; el término ´contenido´ es tomado como cualquier cosa. ¿Contenido? ¿Qué mierda es eso? Y es tomado tan solo como un pedazo de mierda". Clarísimo.
Lo que viene
"Los bipolares no nos deprimimos casi nunca, y todos los días me despierto con mucha emoción por todos los proyectos que tengo, y después me es muy difícil parar. Estoy trabajando en varios proyectos ahora. Entonces cada 20 minutos tengo millones de notas escritas, veo las notas que hice y las tiro. Llego al punto en que quiero parar todo, pero no puedo hacerlo y me parece increíble", dijo a modo de introducción de la gran noticia de la charla: Phil Tippett tiene en su cabeza una secuela de Mad God. "Parece un cartoon de Warner Brothers y no se parece en nada a Mad God", señaló también y definió al tono de la secuela como "una voz más calma que la de Mad God, inspirada en (el animador y realizador) Tex Avery y ese tipo de films".
Por el momento, Tippett está buscando financiación para hacer su proto Mad God 2. "Podría hacerla en dos o tres años. Todo sería stop motion pero hay mucha tecnología nueva que haría que todo se viera mucho mejor y que podría ser más barato. No serían gráficas digitales sino figuras reales. Estuve toda la pandemia escribiendo este film, dibujando y creando todo. Esculpí a todos los personajes, creé otros fondos para ellos. Estoy esperando a que pueda empezar a hacerlo", completó antes de dar las hurras y, por fin, atender a su productora, quien lo llamó en dos oportunidades durante la conversación.
Sus inspiraciones, Jurassic Park, Star Wars, Robocop...
"En 1956 yo tenía 5 años. Acababa de ver King Kong en un televisor pequeño. Eso fue lo primero que vi. Desde ahí me interesé en los dinosaurios, siempre hacía dibujos de dinosaurios, siempre dibujaba calamares y monstruos horribles.
"En 1958 se estrenó Sinbad, de Ray Harryhousen. En ese momento tenía yo 7 años y fue como si me golpeara un rayo. No sabía cómo lo habían hecho pero para mi era magia. Tengo mucha suerte de poder hacer esa magia.
"Cuando tenía 12 años hice dinero trabajando en el arte de películas y pude ahorrar para comprarme una cámara. Trabajaba con arcilla y otros materiales. No pude hacer nada aceptable hasta que tuve 20 años".
"Cuando trabajas en un film para cine tienes un objetivo que cumplir. Por ejemplo, George Lucas. si quiere a Rey o a Jabba u otro personaje, tienen un punto de partida y el resto es solo diseñar.
"George Lucas (con quien trabajó en Star Wars, en 1977) siempre aceptó lo que hacía, me apoyó desde la primera vez. Fue muy fácil, estábamos con gente profesional. Esa fue mi graduación, aprendí mucho de animación y más. Desde aprender a grabar, construir sets. Eran muchas cosas así que tenía que aprender rápido".
"El vínculo con George se creó cuando precisaba personajes para la cantina (de Star Wars). Ahí trabajamos con Rick Baker, éramos cuatro animadores de stop motion. George vio unas marionetas que había creado a los 16 o 17 años y me preguntó sobre ellas".
"Había directores menos geniales a los que llamábamos FID: Fuckin Idiots Directors. Por suerte no he trabajado con muchos de esos".
"Nunca me gustó mucho la animación. No soy muy de la animación, mi mente funciona más en modo tridimensional".
"Paul Verhoeven (realizador de Robocop, 1987) trabajaba para que yo me sintiera cómodo. Él nunca había trabajado con esos FX y confió en mi". Tippett fue el encargado del robot policía que al comienzo del film asesina a un ejecutivo durante una demostración.
"En King Kong o Jurassic Park hay stop motion para escenas complicadas".
"Si usara computadora haría otra cosa. Necesito moverme en el espacio y tocar todo".
"El arte conceptual es complejo, pero entendemos que no hay que trabajar de forma tradicional porque se puede hacer lo que sea a partir del concepto. Lo que sea. Siempre se debe buscar primero el concepto."
"Alguien necesitaba un monstruo en un palacio. El concepto que se me ocurrió fue con un tenedor y una papa. Ese era mi trabajo. Cuando diseñaba a Jabba (para Star Wars) hice varios modelos tridimensionales para poder verlos bien y pensar cómo encajarían dentro de la película".
"Hice tres o cuatro modelos mecánicos para Jabba y me dijeron que no se veía tan bien así que debía arreglarlo. Hubo una especie de roce ahí. Le pregunté a Lucas ´si pudieras elegir cualquier actor para interpretar a Jabba quién sería´ y me dijo que Sydney Greenstreet (actor secundario del film Casablanca, entre otros papeles). Ahí entendí lo que debía hacer con el concepto del personaje".
"No soy alguien que busca sino que encuentra".
"Mis sueños tienen mucha estructura. Eso es lo que quería lograr de manera inconsciente del arte de mis sueños. Me gusta estudiar lo que sueño y ver como puedo llevarlo a mi día a día".
"Mis sueños tienen una narrativa, son una brújula para mi".