El programa "Qunita Bonaerense - Nacimiento con Equidad", relanzado este año por el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, en colaboración con varios ministerios, es fruto del primer sistema de producción industrial en contexto de encierro. Kicillof participó esta semana en un acto en el que se inauguró el polo industrial de la Unidad Penitenciaria N°1 de Olmos.
"Qunita" se trata de un programa interministerial para el acompañamiento y cuidado de la salud de las personas embarazadas y sus familias en el marco del “Plan Nacional de los 1000 días”, creado por la Ley Nacional de Atención y Cuidado Integral de la Salud durante el Embarazo, Parto, Puerperio y la Primera Infancia. Consiste, fundamentalmente en que, al momento del nacimiento, se entrega a las familias un kit con una Cuna-Moisés y elementos de cuidado para bebés, que se otorgarán en las maternidades públicas de la provincia de Buenos Aires que cumplan con las condiciones obstétricas y neonatales esenciales y garanticen los derechos establecidos en la Ley de Parto Respetado.
El plan propone evitar la trágica mortalidad infantil producto de colecho (cuando un bebé fallece por aplastamiento de sus papás dormidos).
Los kits serán fabricados por presos en los polos industriales instalados en la Escuela Técnica Albert Thomas, que es anexa a la Unidad 1 de Olmos, donde 360 alumnos cursan tres tecnicaturas, y próximamente en las unidades 8 de Los Hornos, 32 de Florencio Varela y 47 de San Martín.
Durante el discurso en Olmos, el gobernador bonaerense anunció que serían 8 mil las cunitas producidas por mes.
En tanto, recordó que “cuando se produjeron las primeras unidades hubo una intervención de la Justicia, una Justicia que tenía como objetivo perseguir, a la que no le importaba el Qunita, los pibes, las familias, los beneficiarios, sino estigmatizar, perseguir, señalar, ensuciar”. El entonces juez Bonadio mandó a quemar las cunitas que ya estaban hechas, en lugar de distribuirlas para asegurar el acceso de las familias que las necesitaran.
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“Estamos realizando una inversión histórica con el propósito de transformar un sistema penitenciario que recibimos en estado de abandono, con una sobrepoblación mayor al 100%, porque es también una forma de contribuir con la seguridad ciudadana”, aseguró Kicillof, quien pactó la fabricación del kit en el marco del programa "Más Trabajo, Menos Reincidencia". Y agregó: “Tenemos en marcha obras para completar 8 mil plazas y proyectamos 4 mil más. A ello le sumamos programas de trabajo y formación, lo que nos ha permitido reducir a la mitad los niveles de reincidencia”.
El polo industrial de Olmos cuenta con cuatro áreas: textiles, carpintería, pintura y ensamblaje. Los internos asisten a cursos cuatrimestrales de formación en los que aprenden a confeccionar todos los elementos del kit.
Las cuatro unidades penitenciarias integran un polo de producción textil y albañilería destinado a fortalecer la formación y la capacitación laboral en contexto de encierro.
