Juan Grabois, dirigente político y social, presentó su campaña "Ningún pibe con hambre", cuyo objetivo es abastecer a los comedores a los comedores comunitarios en un contexto en el que, según el sitio web de la campaña, "7 de cada 10 niños y niñas están en la pobreza en nuestro país". En ese sentido, “Hay un proyecto de miseria planificada y un programa de disolución y de saqueo”, advirtió Grabois.
En diálogo con El Destape, el dirigente aclaró que “por lo menos los comedores que yo conozco, que estuvieron auditados por el programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, nadie se llevó ni un paquete de fideos. Desde luego, como en todas las políticas, en la política alimentaria y la política de cooperativas hubo errores, irregularidades, cagadas y posiblemente delitos. Está en discusión si las organizaciones intermedias cumplen bien su función. Lo que no podes decir es que eso hay que destruirlo”.
“Las mejores mentiras se basan en medias verdades. Todas las estrategias en contra del movimiento nacional y popular, desde la corrupción, pasando por la ineficiencia, pasando por algún comedor fantasma, tiene un poco de cierto”, reflexionó acerca de las fake news que alienta el Gobierno nacional. “Frente a la prepotencia de un programa de miseria planificada hay que poner la resistencia política, la resistencia en las calles, la resistencia judicial, como estamos haciendo”, destacó.
Respecto a los últimos movimientos del presidente Javier Milei y su gabinete, planteó que “lo que esta sucediendo con el Pacto de Mayo, que también sucedió con la Ley de bases, es que se está abonando a la provincialización, que es distinto al federalismo, donde cada provincia pareciera ser un Estado Nación aparte. Típica estrategia de balcanización del divide y reinarás”, analizó.
“Caputo y Sturzenegger tienen un amor no correspondido con los mercados”, destacó. “Milei habla de los jinetes de fracaso y vos fijate que lo sube a Sturzenegger que es el fracaso personificado”, señaló. “Cuando uno piensa en casta, habla de nepotismo, funcionarios que se reciclan… eso es el gabinete de Milei”, agregó. Y cuestionó: “¿Cuál es el mérito de Pettovelo? Ninguno, solo ser amiga de Milei. Y tiene cuatro ministerios a cargo. Y hace cagadas en todos”.
Frente a todo esto, propuso como contrapartida: “Creo que deberíamos hacer una gran liga territorial con los gobernadores, intendentes, fuerzas políticas, con el movimientos social y sindical para decirle NO a todo esto. Tenemos que hacer una oposición frontal y cotidiana a un gobierno que es un desgobierno. Que se dedica a viajar con la tuya para promover una ideología deshumanizante”.
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Interna peronista
Este último comentario resulta una crítica que Grabois viene pronunciando hace tiempo, debido a la obvia pasividad de los referentes peronistas y K desde la asunción de la gestión libertaria. “Creo que (muchos) están haciendo negocios de corto plazo”, comentó.
“Hay que conformar un núcleo de naturaleza ideológica con los que tenemos un alineamiento y reconocimiento de las políticas de Nestor y Cristina, y que ese núcleo, programático, tiene que generar el frente más amplio posible para ganar. Pero tiene que tener un rol de conducción, y más colectivo”, razonó.
En oposición a esta idea, Grabois apuntó: "El símbolo más fuerte de la contradicción en esto que Milei llama la batalla cultural es cuando se cae ese pibe en la escuela mientras él daba el discurso de la sexualidad de los burros y el tipo no lo levanta. Nosotros intentamos, por lo menos, levantar al que se cae. El corazón del peronismo no es el industrialismo, que de hecho es previo, sino la justicia social, los descamisados, los cabecitas, la Patria de los humildes".
“Reafirmo que (durante el gobierno kirchnerista) hubo una falta de priorización de la vivienda y de la precarización laboral”, reconoció. Y propuso: “Hay que utilizar los mecanismos constitucionales, contra ministros, vicepresidenta y eventualmente presidente, para que si volvemos al 27% de indigencia, como con Sturzenegger, ahí ya hay inhabilidad moral para seguir gobernando”.
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