Siempre se caracterizó por sus actitudes violentas, por su verborragia neofascista y defensora de las posiciones más rancias de la derecha. Francisco Sánchez, diputado nacional por el PRO de Neuquén (antivacunas, antiderechos, homofóbico y varios etcéteras), volvió este lunes a reafirmar su lugar en el neofascismo argentino, esta vez apuntando su veneno a Cristina Kirchner.
La acción del legislador de Juntos por el Cambio fue en relación al pedido de condena que hizo la fiscalía en la causa de la obra pública en Santa Cruz, por la que pidió 12 años de prisión para la Vicepresidenta y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.
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"12 años por robar impunemente es casi nada", escupió Sánchez en su cuenta de Twitter. Y agregó, orgulloso: "El año pasado presenté un proyecto de ley para que este tipo de delitos sean considerados traición a la Patria. Merecen la pena de muerte, no una liviana prisión domiciliaria", vomitó también.
Ningún dirigente de su mismo espacio político salió a cruzar la violenta actitud del reincidente diputado.
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