ECONOMÍA | Buenos Aires | Contex | cooperativa textil | coronavirus | economía social | estado | Las Flores | pandemia | salud

La cooperativa textil que fue clave en la pandemia

Contex, una cooperativa textil de la ciudad de Las Flores que proveyó la mayoría del equipamiento que utilizó el personal de salud de la provincia de Buenos Aires durante la etapa más crítica de la pandemia de coronavirus.

"Gracias a la economía social el Estado pudo salir de la emergencia de una manera más económica", resumió Damián Luján, presidente de Contex, una cooperativa textil de la ciudad de Las Flores que proveyó la mayoría del equipamiento que utilizó el personal de salud de la provincia de Buenos Aires durante la etapa más crítica de la pandemia de coronavirus.

Es que, cuando los precios de camisolines, botas y tapabocas escalaban en el mundo, varias empresas y cooperativas argentinas mutaron su producción textil, no sólo para afrontar los embates económicos de la Covid-19, sino también para contribuir en dar una ayuda al Estado, atravesado por los imperativos de una pandemia.

SOMOS UNA COOPERATIVA

NOS AUTOGESTIONAMOS

VOS NOS FINANCIÁS

¿CÓMO?

>CLICK AQUÍ<

"Después de 20 años tuvimos liquidez por primera vez", sintetizó en diálogo con Télam Luján, quien describió con orgullo los logros de la cooperativa, que además de desarrollar su propia marca, fabrica camisas para Mimo y Penguin, entre otras firmas.

Otro mérito de Contex es haber capitalizado los saberes altamente calificados de una ciudad orientada a la producción textil y de dos compañías emblemáticas, ya desaparecidas: Cattorini y Gatic.

En diálogo con Télam, Luján relató que, superadas las restricciones que impuso el coronavirus, Contex duplicó este año su personal y ahora cuenta con 60 empleados, en un contexto de demanda permanente y creciente de sus productos.

Desde otro sector donde el asociativismo muestra avances, el guitarrista Bruno Signaroli contó a Télam que la banda que integra, Nonpalidece, se constituyó el año pasado como cooperativa y que esa elección fue una forma de consolidar "un camino distinto", lejos de los mandatos de los sellos discográficos y que "reafirma la independencia musical" y "facilita la organización" de los artistas.

"Es una herramienta muy importante para que la cultura pueda ocupar lugares menos marginales", reflexionó y en ese sentido consideró que se trata de un sistema que puede favorecer especialmente a bandas emergentes.

En el plano educativo, el cooperativismo tiene como exponente a la Escuela Técnica Los Andes, fundada en 1991 por un grupo de profesores, ingenieros y técnicos, que ofrece a sus alumnos pasantías en el INVAP y en el Centro Atómico de Bariloche.

"Los fundadores pensaron que faltaba una escuela con otra orientación y entendieron que este era el mejor formato: donde todos puedan participar y aportar, y no con un único dueño, sino con un consejo directivo dinámico, que haga que el proyecto perdure en el tiempo", analizó el presidente Juan Manuel Prono, en diálogo telefónico con Télam.

Con espíritu solidario, los alumnos utilizan los saberes técnicos para ayudar a la comunidad: crean audífonos, prótesis en impresiones 3D, bastones inteligentes o artefactos para paradas de colectivos para ayudar a las personas no videntes.

De hecho, en el 2018 un grupo de estudiantes diseñó anteojos con sensores para ciegos, que sirven para anticipar obstáculos por encima de la altura de la cintura de las personas, algo que no permite el uso del bastón blanco tradicional. Ese desarrollo les valió el premio del "Desafío Banco Patagonia".

Otro ejemplo valioso de cooperativa es la prestación que brinda Communitas Salud, abocada en la ciudad de Rosario al tratamiento de adicciones, salud mental y vulnerabilidad social.

¿TE GUSTÓ ESTA NOTA?

SUMATE A INFONEWS

>CLICK AQUÍ<

Está integrada por 20 trabajadores de la salud, la educación, los medios de comunicación y la cultura que asisten a los pacientes en un hospital de día y, a su vez, les brindan capacitaciones con el objetivo de poder garantizar su inclusión social.

En el muestrario de emprendimientos cooperativos figura también la ropa interior Perlea, que pese a tener 90 años de historia en el barrio porteño de Villa del Parque, desde el 2021 está en manos de 50 trabajadoras que ocuparon la empresa cuando, en plena pandemia, sus antiguos dueños decidieron cerrar la planta.

Luego de largos meses y negociaciones con la jueza a cargo de la causa, María Soledad Casaza, en diciembre pasado, lograron tener la licencia para constituirse en cooperativa y continuar trabajando en un emprendimiento que abarca todo el proceso de producción, desde el diseño hasta la moldería.



Dejá tu comentario