En el marco de la causa que investiga la muerte del joven Facundo Astudillo Castro , la jueza federal de Bahía Blanca María Gabriela Marrón rechazó un pedido de la Fiscalía para allanar la vivienda de policías investigados.
El rechazo fue decidido pese a que los efectivos hicieron entrega de sus equipos celulares mucho tiempo después y eran otros de aquellos que buscaban los investigadores. De esta manera, la jueza rechazó el pedido que hicieron los fiscales Andrés Heim y Horacio Azzolin , de la Procuraduría contra la Violencia Institucional y de Delitos informáticos, respectivamente.
Concretamente, los fiscales pedían por los celulares de los policías Jana Jennifer Curuhinca, quien intercedió en el primer control que por pandemia frenó a Facundo al ingresar a Mayor Buratovich aquel 30 de abril, y el de la sargento Siomara Flores , quien llevó al joven desde esa localidad hasta Teniente Origone.
Hace poco, la Cámara Federal de Bahía Blanca hizo lugar una serie de medidas de prueba solicitada por la fiscalía, y en ese entonces pidió acceder a los teléfonos para ver qué tipo de información circuló en los mismos. Los policías, incluidos Mario Gabriel Sosa y Alberto González, entregaron sus equipos pero algunos no son aquellos que buscaban los investigadores por lo que se pidió allanamientos para dar con esos aparatos.
La jueza rechazó la medida pedida con los fiscales en medio de una investigación en la que son constantes los cruces entre la magistrada y los fiscales que vienen solicitando una batería de medidas de prueba.
Pocos días, el primer fiscal que investigó el caso, dejó la causa luego de que la magistrada María Gabriela Marrón aceptara la inhibición pedida el pasado 12 de febrero. Se trata de Santiago Ulpiano Martínez, quien había pedido inhibirse por las diversas imputaciones a su actuación de parte de las querellas, incluidas dos recusaciones y una denuncia de Cristina Castro, madre del joven, ante la Procuración de la provincia de Buenos Aires.
Por otro lado, la mamá de Facundo , Cristina, a través de sus abogados solicitó la asistencia de un área del Ministerio Público Fiscal a raíz de situaciones llamativas en los últimos días que padeció. Una de ellas tiene que ver con la presencia en plena noche de cinco patrulleros que concurrieron a su domicilio por un supuesto llamado de emergencia por ruidos molestos.
Astudillo Castro desapareció el pasado 30 de abril del 2020 cuando salió de su casa de la localidad bonaerense de Pedro Luro y se dirigía a dedo hacia la casa de su ex pareja en Bahía Blanca. La última vez que fue visto con vida, según consta en la causa, estaba junto a efectivos de la Policía Bonaerense, quienes lo detuvieron en un control por la violación al Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio por la pandemia de Covid-19.
El 15 de agosto pasado, el cuerpo del joven fue hallado en un cangrejal de la localidad de General Daniel Cerri y, según la autopsia, sufrió una muerte por asfixia por sumersión. El pasado 18 de febrero, el destacamento policial de Teniente Origone, donde fue encontrado el año pasado un objeto de Facundo, fue allanado por Gendarmería Nacional y durante el procedimiento se hallaron rastros biológicos que están siendo analizados.
Ese procedimiento fue dispuesto luego de que la Justicia habilitara la realización de medidas de prueba en la línea de investigación sobre la responsabilidad de la Policía bonaerense en la desaparición forzada seguida de muerte del joven.
Se trata de medidas de prueba que habilitó la Cámara Federal de Bahía Blanca, cuales han sido pedidas por los fiscales Andrés Heim y Horacio Azzolin, quienes recusaron y solicitaron apartar por "parcialidad" a la jueza federal de Bahía Blanca, María Gabriela Marrón, a quien acusan por abonar la hipótesis única del accidente.
