La eliminación de la Ley de Alquileres sirvió para cualquier cosa menos para bajar los precios. Hoy, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el alquiler de un monoambiente ronda los 275 mil pesos y, de acuerdo al primer informe del Índice de Emancipación (IDE), trabajadores jóvenes (18 a 24 años) con empleo formal debieron utilizar el 69,6% de su sueldo pagar un arrendamiento mensual entre enero y marzo de este año.
En el caso de convivientes, implicó el 48% de la suma de dos salarios para un departamento de dos ambientes.
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Las cifras de la capital argentina están muy por arriba del umbral de asequibilidad (relación "aceptable" entre ingresos y alquiler) que según los números del mundo es del 30%.
Durante el primer trimestre de 2024 el valor promedio de alquiler en la Ciudad fue de $274.482 (monoambiente) y de $ 378.519 (dos ambientes).
Asimismo, los alquileres implican un incremento interanual de +11,9% para el alquiler de un monoambiente (requería el 58% de un salario jóven en el primer trimestre de 2023) y de +9,9% para un departamento de dos ambientes (demandaba el 38,1% de la suma de dos salarios un año atrás).
Mediante una serie histórica que se inicia en 2018, el primer reporte del IDE mide las oportunidades que tienen las y los trabajadores jóvenes (18 a 24 años) con empleo formal para ingresar y sostener el alquiler de una vivienda en la Ciudad.
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El índice se realizará de manera semestral por el denominado Instituto de Desafíos Urbanos Futuros (IDUF).
De acuerdo al informe, para lograr una relación "aceptable" entre ingresos y valor del alquiler (30%) en el primer trimestre del año, el salario necesario para el alquiler de un monoambiente fue de $ 914.941, es decir, un 132% más que el sueldo promedio de las y los jóvenes de esta edad.
