La región de la Araucanía posee un territorio que comienza desde el norte a la altura, prácticamente, de Loncopué y se extiende, aproximadamente, hacia el sur hasta el paso internacional Mamuil Malal. En toda su extensión se puede hallar una vasta diversidad de geografía, paisajes y culturas. Desde Temuco, capital de la región y epicentro turístico y comercial por su conectividad aérea y terrestre, hay en promedio 90 minutos de distancia en auto a cada uno de los dos escenarios diferentes (y a la vez majestuosos) que preponderan en la Araucanía: las montañas y el mar.
La zona andino lacustre está hacia el este de la región y limita con la provincia del Neuquén. Allí se concentran áreas silvestres protegidas, volcanes, glaciares, lagos y termas. Por su parte, la zona de la costa sobresale por su gran valor cultural-étnico, por las impetuosas aguas del Pacífico, y la riqueza en especies hidriobiológicas de sus aguas. Si bien la geografía cordillerana es disímil en relación a la costera, no hay dudas que un color predomina el recorrido a lo ancho de la región: el verde, en su infinidad de matices. Es que la Araucanía es una zona de las más húmedas de Chile y por eso es posible hallarse inmerso en una flora heterogénea y abundante en cada kilómetro que se recorre, desde Lonquimay hasta Puerto Saavedra, por dar un ejemplo.
La diversidad también reside en la cultura, que va tomando aspecto en consonancia con la zona de la Araucanía que se encuentre. Con disponibilidad de alojamientos en cabaña y también en ruka, los turistas son recibidos por las comunidades mapuche con una cálida hospitalidad y sabrosas comidas autóctonas, como catutos, pan amasado, huevos de campo, café de trigo, té de hierbas, queso, y mermeladas caseras.
Emprendimientos mapuche como Piuke Leufu, radicado en Puerto Saavedra, ofrece café de trigo, artesanías, recorridos por el museo étnico de la Isla Llepo y paseos en lancha en el lago Budi, único cuerpo continental de agua salada con desembocadura al mar en Sudamérica.
La Araucanía ofrece un crisol de vivencias. Tiene todo tipo de paisajes y múltiples actividades para los visitantes. Hay paisajes rodeados de volcanes, montañas, parques nacionales, bosques, termas, lagos, ríos, mar. Actividades para realizar en familia y con amigos: trekking, montañismo, mountain bike, rafting, esquí, pesca deportiva, deportes náuticos, turismo en comunidades mapuce, turismo religioso, entre otras. Es una región que invita a viajar, recorrer, relajarse y disfrutar de la vida al aire libre en medio de la naturaleza.