Las clases presenciales volverán este lunes 31 de mayo. Así lo anunciará el propio Horacio Rodríguez Larreta en conferencia de prensa. Y si bien los detalles son todos trascendidos, lo que sí es una certeza es el rechazo rotundo de gremios docentes y del gobierno nacional, quienes tildan de irresponsable al jefe de gobierno porteño por esta decisión. El DNU de Alberto Fernández mencionaba que los nueve primeros días de esta cuarentena serían con controles estrictos. Y si bien CABA lo respetó, decidió que pasado ese plazo se vuelva a cierta "normalidad" como en la fase anterior y que, una vez más, la comunidad educativa retome la presencia en las escuelas. Como respuesta, una pared: el ministro de Educación, Nicolás Trotta, enfatizó temprano que "debe continuar el modelo educativo de no presencialidad" en las zonas del país que se mantengan en las categorías de "alarma sanitaria y epidemiológica", como el Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA).
El funcionario nacional no lo desliza sin datos en las manos, lo afirma sabiendo que en los últimos días la curva de contagios creció tanto que llegó a su pico más alto con un récord superior a los 41 mil casos en tan solo 24 horas. Tal como publica Telam, el funcionario deseó de que, en Larreta, "prime el cumplimiento no selectivo de la norma".
"La semana que viene en lugares con alto riesgo epidemiológico se analizará el regreso a la presencialidad administrada, pero en los lugares de alarma epidemiológica, hay que continuar con el modelo educativo en el marco de la no presencialidad", dijo el ministro en declaraciones a radio La Red.
Por su parte, el secretario adjunto de Ademys, Jorge Adaro, pidió que en las escuelas porteñas se mantenga "el vínculo virtual" hasta que "la vacunación docente esté realizada de manera completa", ante la inminencia del anuncio de la vuelta a la presencialidad de parte de este distrito.
"El gobierno de Larreta intenta volver a una supuesta presencialidad", dijo Adaro en diálogo con El Destape Radio y recordó que "antes de esta suspensión" de la concurrencia a las aulas de parte de los alumnos de escuelas porteñas, "las familias habían decidido no enviar a sus hijos e hijas a las escuelas por el incremento de contagios en todo el país".
Ante este inminente regreso a la presencialidad en las aulas porteñas, Ademys propone "mantener el vínculo virtual" hasta que estén "vacunados todos los trabajadores y trabajadoras" de la educación. Y se anunció, luego, que harán paro en protesta.